El Gobierno británico concretó ayer su ofensiva contra las compañías multinacionales que tributan en otros países por los beneficios que obtienen en Reino Unido. Se gravará con “una tasa del 25% los beneficios que las multinacionales obtienen por su actividad económica en el país y que luego desvían para tributar a otro país”, anunció George Osborne (foto), el ministro de Economía.
Fue uno de los puntos más destacados de la llamada declaración de otoño, un discurso en el que el titular de Economía adelanta lo que será el presupuesto del Estado del próximo marzo, y que este año tiene una especial relevancia: se trata de uno de los últimos eventos en el calendario político antes de las elecciones generales del próximo mes de mayo. Las declaraciones de otoño constituyen una especie de presupuestos en sí mismas, y el de este miércoles incluía medidas que se aplicarán antes de que los británicos acudan a las urnas.
Fonte: Aqui
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