Credit Suisse se convirtió en el primer gran banco en dos décadas demandado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, por haber dado asesoramiento financiero a clientes estadounidenses para poder evadir el pago de impuestos bajo la protección del secreto bancario. El segundo grupo financiero del país admitió unas horas después su culpabilidad y es sancionada con más de 2.500 millones de dólares (unos 1.800 millones de euros).
(...) La investigación de Credit Suisse puede servir a partir de ahora como modelo para perseguir el fraude financiero en EE UU. En el punto de mira de los reguladores está también BNP Paribas, el banco más grande de Francia. Como en la entidad suiza, su expediente no está relacionado con la pasada crisis financiera sino por haber permitido sortear el embargo impuesto a países como Irán y Sudán.
"No importa el tamaño de la entidad, será perseguida", concluyó Holder en rueda de prensa, esperando que la reprimenda contra Credit Suisse sirva de aviso para los otros grupos financieros. "Pagarán las consecuencias", remachó, dejando claro que no se hace distinciones tampoco respecto al origen de la entidad. Es la mayor multa impuesta hasta la fecha por un fraude tipo fiscal. También se admite que se están adoptando pasos para modificar su estructura y reforzar los controles internos.
Fonte: El País
Assinar:
Postar comentários (Atom)
Nenhum comentário:
Postar um comentário